Hoy mientras perdía de manera absurda una perfecta izquierda me acorde de lo torpe que era de pequeño jugando al futbol. Tampoco es que fuera tan malo, lo que pasa es que si el resto de tus amigos eran maquinillas tus carencias se notaban más. Yo era de aquellos a los que se solía elegir de último, a los que en raras ocasiones pasaban el balón. Y un día vas y decides pegarte una carrera hacia la portería contraria, la pides, alguien se apiada de ti y te manda un pase largo de 30m, la bajas con el pecho, no sabes ni como lo has hecho, sientas al portero y cuando vas a chutar una piedra en plan hija de puta choca con tu puntera, eso provoca que a puerta vacía mandes el balón fuera a 2m del jersey que hacía de poste, vuelves a escuchar la frase casi al unísono por parte de tus amigos…¡pero que burro eres!
No sé si será un clásico, pero cuando estas en el momento justo y en el lugar oportuno es cuando tienes la típica caída absurda, y esta vez no había piedra…
Joderrrr!!!...esa es la historia de mi vida...jjajajajaja...
ResponderEliminarUn saludooo...
Jeje...que dura infancia ALX, eso si, era una puta maquina jugando al pin-ball, asi me fue...jajaja
ResponderEliminarChao!
Pues yo siempre quedaba de portero, luego con los años pasé a defensa, pero un paquete siempre, en fin jajajajajaja.
ResponderEliminarJorge, ese era un puesto sufrido, a veces uno se llevaba unos buenos balonazos...jajaja
ResponderEliminarA ver si te veo el finde en el agua!