Parte del problema, Fran, es que antes no se publicitaba (más que alertar) la llegada de un temporal. Y la gente tenía más respeto al mar (justificado o no). Ahora es, casi, un día de fiesta, una excusa para acercarse a la costa y disfrutar del espectáculo. Pero hay gente que quiere participar en él...aunque no se de cuenta realmente de lo que representa el hacerlo.
Hola Carlos! No queria que esto sonase como un dedo acusador, pero creo que hay comportamientos que sobrepasan la temeridad, y repito, que igual esto nos puede pasar a cualquiera. Hoy leia en La Voz de Galicia unas declaraciones de personas que estaban en el momento que aparecio la fatidica ola, tal y como lo explicaban debio de ser terrible. Uno de los presentes comentaba que la vio venir tal y como se formo, que pego una voz y echo a correr, por lo que parece esta persona estaba algo mas alejada y pudo salvarse. En todo caso, es triste que aprendamos la lección a base de que otras personas pierdan la vida. Un saludo!
Fran, muchas veces me viene a la cabeza lo mal que lo han tenido que pasar todas esas personas arrastradas por olas gigantescas... esos momentos tan angustiosos, unos para salvarse, otros para morir... No sé, aunque sea ignorancia me da la sensación que con esas condiciones tiene que surgir una especie de instinto de supervivencia para no acercarse tanto a ese infierno de agua... En fin, una pena morir así... Por otro lado, te deseo un fantástico fin de semana amigo... ¡Un abrazo!
Chordi, ese mismo pensamiento lo he tenido en mas de una ocasión. sobre todo siempre que leo este tipo de noticias. Desde luego es una forma de morir de lo mas angustiosa. Quizas me este repitiendo, pero insisto, ojala de estas tragedias todos aprendamos algo para la proxima vez. Buen finde amigo!
Pues no...no se entiende!!!
ResponderEliminarUn saludooooo....
De verdad que no ALX, la persona de la derecha con el carrito de niño tiene lo suyo...
EliminarSaludos!
Parte del problema, Fran, es que antes no se publicitaba (más que alertar) la llegada de un temporal. Y la gente tenía más respeto al mar (justificado o no). Ahora es, casi, un día de fiesta, una excusa para acercarse a la costa y disfrutar del espectáculo. Pero hay gente que quiere participar en él...aunque no se de cuenta realmente de lo que representa el hacerlo.
ResponderEliminarHola Carlos!
EliminarNo queria que esto sonase como un dedo acusador, pero creo que hay comportamientos que sobrepasan la temeridad, y repito, que igual esto nos puede pasar a cualquiera. Hoy leia en La Voz de Galicia unas declaraciones de personas que estaban en el momento que aparecio la fatidica ola, tal y como lo explicaban debio de ser terrible. Uno de los presentes comentaba que la vio venir tal y como se formo, que pego una voz y echo a correr, por lo que parece esta persona estaba algo mas alejada y pudo salvarse. En todo caso, es triste que aprendamos la lección a base de que otras personas pierdan la vida.
Un saludo!
Fran, muchas veces me viene a la cabeza lo mal que lo han tenido que pasar todas esas personas arrastradas por olas gigantescas... esos momentos tan angustiosos, unos para salvarse, otros para morir... No sé, aunque sea ignorancia me da la sensación que con esas condiciones tiene que surgir una especie de instinto de supervivencia para no acercarse tanto a ese infierno de agua... En fin, una pena morir así...
ResponderEliminarPor otro lado, te deseo un fantástico fin de semana amigo...
¡Un abrazo!
Chordi, ese mismo pensamiento lo he tenido en mas de una ocasión. sobre todo siempre que leo este tipo de noticias. Desde luego es una forma de morir de lo mas angustiosa. Quizas me este repitiendo, pero insisto, ojala de estas tragedias todos aprendamos algo para la proxima vez.
EliminarBuen finde amigo!