Ratones y gatos

El alcalde de Bayona (Jesús Vázquez Almuiña PP) tira de idea precocinada por su comité de sabios y dice que se siente un ratón. Al ratón que ejerce como alcalde se le han acercado un grupo de afectados por las preferentes hasta su domicilio y le han puesto unas pegatas en su portal. El regidor municipal en un alarde de originalidad tira de ideario/pepero/salva patrias y suelta por su boca lo siguiente: “No va a amedrentarme ese grupito de violentos que trataron de marcarme como a los judíos de la Alemania nazi” La verdad que la comparación a la que se agarran estos miserables ya me empieza a tocar los cojones. 

Los violentos se enfrentan a los indefensos funcionarios

Ojo con el peligroso anti-sistema asomando entre las fuerzas del orden

En sus actos de protesta incluso llegan a utilizar tizas

Ese grupito de violentos al que se refiere el alcalde de papa Mariano son afectados por las preferentes. No amigo Juan, no son perro flautas, son gente normal que se ha tirado toda su vida trabajando como hijos de puta para ver como llegado el momento la sucursal de toda la vida, esa misma en la que depositaron sus ahorros, esa sucursal en la que sus empleados eran casi como amigos, gente en la que podías confiar, pues resulta que esa misma sucursal se ha quedado con sus ahorros y no hay forma de que se los devuelvan.

Este es un problema que lleva tiempo coleando. Los afectados por esta estafa se han convertido en estampa habitual. En su mayoria se trata de gente jubilada, con pocas fuerzas y muchas canas, algunas de estas personas con serios problemas económicos que asisten perplejos a un robo consentido. A pesar de todo ahí están, batallando, con sus camisetas, sus andares cansinos y sus bocinas. Haciéndose notar y recordándole a los políticos que entre sus deberes esta la defensa de los derechos de los ciudadanos. Es por eso que al ratón que ejerce como alcalde de Bayona no le debería de molestar que un grupo de gatos le recuerde cuáles son sus deberes.

Es más, creo que todos los ratones deberían de estar contentos y dar gracias a sus dioses de que en este puto país no tengamos la facilidad de adquirir un arma como tienen en los USA. Si yo me viese en la situación de alguna de estas personas quien sabe, igual me pasaba por la armería del barrio y me liaba la manta a la cabeza…